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White·Devil: No entiendo a mis contemporáneos. No entiendo a mis semejantes...

14.7.10

El precio de la libertad.



Sacó la cabeza por la ventanilla y respiró profundamente, hasta hervirle las venas. Hasta sentir en la sangre euforia y libertad. Miró hacia adelante, la infinita carretera que se perdía en el horizonte, mientras ella reía y aceleraba.

-¡Libres! ¡¡Somos libres!!- decía él regresando a su asiento y abrazándola, mientras ella sonreía, sin quitar la vista de la carretera- Al fin somos libres, princesa.
-¿No has pensado que quizás algún día nos arrepintamos?
-¿Por qué iba a pasar eso, nena? ¿Acaso no me quieres?
-Sabes que no lo digo con esa intención- dijo sosteniendo en sus labios la sonrisa más sincera que sabía mostrar- Pero ha costado mucho ser felices, y completamente libres. Hemos hecho daño.
-No, nena, solo lo hemos devuelto-Dijo mientras le besaba ligeramente en la mejilla.-Aquella gente merecía peores castigos que la muerte, de una rebuscada forma, les hemos liberado de una condena.
-Cierto. Nos hemos ganado la libertad.
-Y un billete al infierno.

Esta pareja huyó de la ciudad de Nueva York, en busca de la libertad que tanto ansiaban. Tanto ella como él fueron buscados en toda Norteamérica por homicidio múltiple. Lo que la ley, los jueces, los policías y los maniáticos del orden no quieren entender es que la gente reacciona muchas veces por impulsos, son animales, al fin y al cabo, y tienen motivos para todas y cada una de sus acciones.
Ésa actitud fue la que después de disfrutar del fin de sus vidas uno junto al otro, y morir a la vez, como antaño prometieron, les abrió las puertas de mi Edén. Ellos son mis ángeles.

No os engañéis, no todo el mundo es bienvenido aquí. No busco asesinos ni doy cobijo a villanos. Aquí solo entra gente noble, honrada, que ha vivido con orgullo y ha mantenido alerta su instinto animal. Todos los hombres mueren, pero sólo por mí serán guarecidos quienes realmente han vivido.

KFU

1 comentario:

Regaladme palabras.

Asco de vida!